Es El Espiritu Santo que toma la Palabra y hace la obra por Daniel Nicolas Pastore

En mis primeros años de predicador, la parte más difícil para mí era el final del mensaje, y era difícil porque lo que se esperaba de todo predicador es que cumpliera con el rito de hacer un llamamiento a venir a adelante. Es decir no hacer tal cosa era como dejar un trabajo incompleto. Recuerdo que luego de cada mensaje sentía una gran tristeza por el hecho de que hacia ese llamamiento sin sentir el respaldo de Dios, y esto me llevaba a pensar que tal vez yo no había sido llamado a subirme a una plataforma. Pero años más tarde comprendí claramente, que lo que sentía era la convicción del Espiritu Santo, mostrándome que esos llamamientos no eran parte del modelo de Dios, sino propios de un sistema religioso que desconoce y niega la eficacia Del Espiritu Santo para hacer la obra de principio a fin. Dios no necesita de llamamientos humanos, Es El Espiritu Santo que toma la Palabra y hace la obra tanto de engendramiento de nuevas criaturas como así también la de edificación de aquellos que ya son salvos.